De manera aún tímida, las inmobiliarias incorporan espacios, conexiones —para una instalación futura— o electrolineras para cargar los vehículos eléctricos.
La electromovilidad está ganando un espacio en los proyectos inmobiliarios.
Ello, pese a que aún no existe la obligación de contar con instalaciones en los edificios, dice Eduardo Valente, socio líder para la Industria de Energía y Minería de EY.
‘No obstante, en Chile ya se ha creado la regulación eléctrica que facilita la instalación de cargadores eléctricos. Para ello solo debe ingresar el trámite TE6 a la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC). A la fecha, es voluntaria la instalación de cargadores, pero ya se observan proyectos inmobiliarios donde se comienza a analizar la inclusión de cargadores en estacionamientos de visita y otros, lo cual traerá adicionalmente nuevos modelos de negocios, donde cada punto de estacionamiento con un cargador tendrá el potencial de transformarse en una electrolinera’, afirma.
Nepross Escalona, agente inmobiliaria de Masterecord Propiedades, agrega que las inmobiliarias ya han visto las potencialidades de este cambio de paradigma.
‘La fuerza de la electromovilidad en el sector inmobiliario de nuestro país traerá enormes beneficios medioambientales, gran plusvalía —debido a que afecta positivamente el precio del bien raíz— y, un punto muy importante, la disminución en el valor de los gastos comunes, debido a que los puntos de carga estarán habilitados tanto para visitantes como para público general con un costo asociado, cuya rentabilidad será contribución a favor de los gastos comunes del edificio’.
El ejecutivo de Masterecord nombra también ciertos casos pioneros de este avance: ‘Por ejemplo, la inmobiliaria Echeverría Izquierdo y Engie Factory vieron una oportunidad para instalar estaciones de carga eléctrica para autos en desarrollos inmobiliarios, inaugurando en la comuna de Providencia un proyecto inmobiliario residencial con electrolineras de libre acceso para el público, que opera a través de una tarjeta especial’.
Para instalar
Por su parte, Gonzalo Errázuriz, gerente de proyecto Edificio Riesco Leguía, de Indesa, cuenta que en ese condominio de Las Condes, en construcción, implementaron espacios para la carga de autos eléctricos. ‘Así, dos estacionamientos de visita tienen el kit instalado. Además, y al igual que en las casas de Viñas de Chicureo, todos los estacionamientos de los residentes —72 en total— cuentan con puntos eléctricos, para facilitar la instalación futura de los kits, en caso de que los propietarios así lo estimen’.
Comenta que, ‘en el caso de los estacionamientos de visitas del Edificio Riesco Leguía, el cobro de las cargas se incluye dentro de los gastos comunes, por lo que el uso se vería reflejado en el reporte que llega mensualmente a los residentes. En el caso de que uno de los residentes decida instalar el kit en su estacionamiento, este contará con un medidor anexado a la cuenta de su departamento, por lo que el consumo se le incluiría dentro de la cuenta de luz mensual’.
A su vez, Cristóbal Fuenzalida, subgerente de Proyectos de Inmobiliaria Manquehue, señala que esa compañía está construyendo el proyecto de departamentos Teniente Montt 1980, en Ñuñoa, el que dentro de su equipamiento considera estacionamientos habilitados para conectar kits de carga de autos eléctricos.
‘Es la primera vez que la compañía ofrece este servicio en sus desarrollos y creemos que es el proyecto indicado para hacerlo, por el grupo al que está orientado’, cuenta.
Explica que los cargadores se ubican en los estacionamientos. Inicialmente, el 30% de estos tendrá disponibilidad para incorporar los kits eléctricos. Sin embargo, tiene la opción de ser ampliado hasta el 100%.
Señala que ‘la compañía de electricidad ofrece los kits por un valor aproximado de 900 mil pesos. Cada kit está conectado a un remarcador, el cual mide el consumo y lo carga en la boleta de electricidad del departamento asociado. Así, cada usuario controla su propio consumo, el que se ve reflejado en una sola boleta’.
En alza
Rodrigo Boetsch, gerente general Inmobiliaria Boetsch, en tanto, relata que incorporarán facilidades para electromovilidad en su Edificio Gabino, ubicado a pasos de avenida La Dehesa. ‘Además, en etapa de desarrollo se encuentran dos otras iniciativas en la capital. Se trata de Parque de Los Reyes (comuna de Santiago) e Isabel Riquelme (San Joaquín)’.
Indica que ‘Edificio Gabino contará con los servicios de Enel X —uno de los proveedores que existen en el mercado—, que facilitará un empalme de 16 kW para la carga de autos eléctricos. Cada residente que quiera usar esta amenidad podrá hacerlo mediante una cuenta de usuario facilitada por la firma proveedora. Para los proyectos Parque de los Reyes e Isabel Riquelme se está en proceso de definición de quién entregará el servicio’.
Y José Luis Calderón, gerente de Marketing de Almagro, afirma que desde el año 2018 ‘estamos incorporando la factibilidad técnica para que, en caso de que un propietario cuente con un auto eléctrico, este pueda hacer toda la instalación necesaria (con Enel) para cargar su auto. Incorporamos esta solución porque en un futuro cercano cargar un auto eléctrico será una necesidad diaria, y es mucho menos costoso diseñar pensando en la solución en vez de incorporarla después. Esto lo hemos incorporado en la mayoría de nuestros nuevos proyectos inmobiliarios, entre los que destacan el Edificio Icono, en Santiago centro, y otros ubicados en las comunas de Providencia y Las Condes’.
¿Cuánto demorará este proceso de cambio?
Ignacio Santelices, director Ejecutivo de la Agencia de Sostenibilidad Energética (AgenciaSE), dice ‘que existen múltiples escenarios de penetración, pero estos se irán concretando y tendremos mejor capacidad de proyección en la medida que otros elementos avancen, como por ejemplo la aprobación del proyecto de ley de eficiencia energética, la infraestructura de carga, las políticas regionales de incentivos, entre otros. Se espera que entre 2022 y 2025 un vehículo eléctrico sea similar en precio a uno de combustión interna, por lo que a partir de esa fecha es muy probable que empiece la masificación de los vehículos eléctricos. A nivel de metas, tenemos que al 2022 esperamos tener más de 2.000 vehículos eléctricos circulando, al 2040 un 100% del transporte público y al 2050, al menos un 40% del parque total’.
Y añade que según el Estudio de Movilidad Eléctrica en Chile de la Agencia de Sostenibilidad Energética (AgenciaSE), desarrollado por la consultora internacional EBP, la penetración de vehículos eléctricos se traduce en que al año 2040 se realizarían del orden de 280 millones de episodios de carga de vehículos al año.
A su vez, Carla Tapia, gerenta de Estudios de Montalva Quindos Servicios Inmobiliarios, cree que el impacto de este cambio en el sector inmobiliario será paulatino.
‘Los proyectos inmobiliarios siempre se han ajustado a las necesidades de la demanda cuando esta es realmente significativa. En Chile, actualmente existe un parque automotor eléctrico muy pequeño y selectivo. Existen más posibilidades de que la tecnología usada en proyectos avance en otros aspectos primero, como el reciclaje, antes de plantear equipamiento para autos eléctricos’.
Señala que actualmente existen pocos puntos de carga, ‘los cuales se incrementarán en la medida en que aumente el parque automotor. Se estima que hacia el año 2025 se podría producir una inflexión con los autos eléctricos, al punto de que lleguen a tener el mismo valor que uno convencional’.
Los ahorros
Ignacio Santelices, director ejecutivo de AgenciaSE, explica que la batería de un vehículo eléctrico puede almacenar entre 40 y 60 kWh, lo que equivale al consumo de un hogar promedio durante al menos una semana. Esa carga le permite al vehículo funcionar por varios días, y en términos monetarios es al menos 4 veces más económico que un vehículo a gasolina.
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